Muchas veces , hoy es una de ellas, me pregunto, que hubiera pasado si…..
No lo sé.
Mi abuelita diría “a que llorar sobre la leche derramada?”
Sé que me hubiera gustado, como alguna vez le dije a mi hija, morir en mi cama, sosteniendo la mano de mi esposo y rodeada por mis hijos y nietos.
No pudo ser.
Y no corresponde buscar culpables, la vida? La juventud? La insensatez ¿o quizás el hecho de ser esto que somos? Tan poco original, tan trillado
"Asomaba a sus ojos una lágrima
y a mi labio una frase de perdón;
habló el orgullo y enjugó su llanto,
y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino, ella por otro;
pero al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: "¿Por qué callé aquel día?"
y ella dirá: "¿Por qué no lloré yo?"
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Conozco gente perfecta
Conozco gente que juzga mi hacer y vivir y opina sobre mis opciones y hechos.
Conozco gente para la que el poema no tiene cabida, hicieron lo que debían y están tan cerca de la perfección que ya levitan rumbo al paraíso.
No es mi caso
Soy terráquea, terrena humana
Siento tristeza a veces, de que esa perfección no me haya alcanzado, pero felicidad por haber tenido la oportunidad de vivir instantes, momentos que aunque muchos lo duden, se acercaron mucho a la felicidad total.